Nuestra comunidad de ciudadanos activos es la unión de personas que quieren actual por una ciudad ecoeficiente. Un ciudadano ha escrito este artículo que interpreta muy bien algunas implicaciones del punto 2 de nuestro programa.
RENACEN LAS ESPERANZAS
“POR UNA CIUDAD ECOEFICIENTE, UNA BOGOTÁ MÁS CONSCIENTE”.
Del 100% del área de Bogotá, D.C. que de sur a norte se levanta, desde el municipio de Colombia – Huila, hasta el sector de la Caro, solamente el 25% de la misma, está poblada y constituye su perímetro urbano; el 75% restante, corresponde a su área rural; a esa Ciudad ecológica anhelada y añorada que debemos consolidar, proteger y disfrutar de manera sostenible, sensata y justa.
Porque esta Capital moderna de 7.363.000 habitantes en la actualidad, acorde al modelo de desarrollo propuesto, va camino a convertirse en una ciudad inviable donde será imposible vivir.
¡Eso no puede suceder! En estos momentos de cambios de estado de consciencia planetaria y humana, la Tierra clama por un reencuentro del hombre con la naturaleza, por una recapacitación consciente, para encontrar la anhelada libertad de las personas.
Ante las Necrópolis que vamos agenciando por doquier, se propone una Ecópolis (Ciudad ecológica y verde), para recuperar la esperanza, para volver a soñar… El acelerado y nefasto proceso de calentamiento global del Planeta, está acabando con selvas y bosques, va aminorando zonas de paramos y de nieves perpetuas; va desertificando extensos parajes y trayendo sequias por doquier.
Y ante este devastador panorama, la normatividad internacional imponiendo direccionamientos económicos como los de la OMC (Organización Mundial del Comercio), peligrosamente quieren acabar con nuestra extraordinaria y generosa Megadiversidad, con nuestra soberanía ecológica; ambiental y alimentaria.
Las medidas sanitarias y fitosanitarias, si bien son necesarias, han diseñado diseñadas, sin embargo, desde el tenor de una deuda externa que nunca se paga, así como desde la óptica del favorecimiento a la banca internacional, elementos que combinados, anuncian constantemente el saqueo inmisericorde de nuestros recursos naturales.
Cabe resaltar también que se ha puesto en boga, la necesidad de establecer el conocimiento de la trazabilidad de los productos alimentarios y medicinales; el manejo de compensaciones, incentivos y retribuciones por la sostenibilidad del ambiente que poseemos, se ha consolidado como una nueva oportunidad económica de estímulos, denominada tras la huella del carbono, que pone a pensar a Ecólogos, Biólogos, Microbiólogos, Bacteriólogos, Arquitectos, Ingenieros Antropólogos y Humanistas, entre otros, y los sumerge en novedosas investigaciones consideraciones y conceptualizaciones, para abordar las necesarias posibilidades de cambio que requiere el planeta. para ello está, la consolidación de la Ecópolis, y ello constituye uno de los nortes que orientan Sentido Común.
Ciudad Verde en lo que al brusco cambio climático que soportamos se refiere, es el desafío de una región estratégica que afronta el mayor reto del siglo XXI: entender y utilizar los recursos que la Región rural de la Cuenca del Río Tunjuelo y el gran Sumapaz dispone, para alcanzar el bienestar integral de sus pobladores.
Está proyectada y diseñada, en respuesta a los retos derivados del calentamiento global y a la crisis energética mundial que hemos visto acentuarse en el último tiempo.
Se trata de crear un nuevo concepto, para determinar este territorio como ciudad ecológica, atendiendo a su realidad de vida futura, para el aprovechamiento al máximo de los recursos naturales, para la protección y vigía del agua, para ser dispuesto como destino turístico sostenible por excelencia, sobre la conservación y el aprovechamiento de la tierra, sobre una gestión ambiental que busca la sostenibilidad de una Ciudad Capital que debe ser reconocida por propios y extraños, en el mundo, como el “destino verde, armónico y funcional deseado”.
La Ecópolis intenta realizar un cambio de conciencia de sus habitantes frente a los problemas medioambientales y el acorde relacionamiento de las especies, establece un impulso al bienestar de vida, partiendo de la eficiencia y el ahorro energético, de la promoción e implantación de las energías renovables, entre ellas la solar, y de la concepción de la región campesina, como el escenario de la transformación necesaria, para un cambio de modelo en nuestros hábitos de vida y en el uso de los recursos, en el marco de un modelo de desarrollo sustentable, sostenible; a escala humana y de conservación y evolución con los demás seres. “Una ciudad protectora de vida, donde su fundante es el agua”.
¿Por qué la Ecópolis?
La Región Rural de la Cuenca del Río Tunjuelo y el Gran Sumapaz, tiene que dar respuesta, al igual que todas las ciudades del mundo, a los efectos negativos del cambio climático y al uso irracional de los recursos disponibles. Inspirados en las raíces históricas del espíritu emprendedor e innovador de nuestras posibilidades ancestrales y atentos a las recomendaciones de los expertos y autoridades reconocidas en el medio, creemos estar ante una oportunidad única de aprovechar las circunstancias que el momento histórico de sensibilización a nivel mundial y los ejemplos de experiencias adquiridas por otras ciudades en otras latitudes, nos proporciona; allí se relacionan, los elementos de juicio necesarios para motivar e involucrar a nuestros gobiernos, a empresas y ciudadanos, para alcanzar las metas de un desarrollo armónico, proteccionista y sustentable".
Mediante estas acciones La Ecópolis Soñada, se destacará, mejorando al mismo tiempo, el bienestar de sus habitantes y proyectándose entre otras actividades productivas, como el destino turístico responsable con el ambiente y con la pervivencia de las especies en la tierra.
¿Qué pretende hacer La Ecópolis del Tunjuelo?
® Crear conciencia ciudadana sobre el significado y los desafíos que implica el calentamiento global y el brusco cambio climático. De la misma forma, concientizar en torno a la contaminación que genera la dependencia al modelo energético basado en los combustibles fósiles y la fuga de divisas que dicho sistema genera.
® Realizar acciones de intervención, comunicación y sensibilización que pongan en relieve el papel que la Ecópolis, pretende desempeñar como introductora en Colombia del paradigma de la sostenibilidad, basada en la economía del bajo consumo de carbono.
® Liderar las acciones contra el cambio climático brusco agenciado por el calentamiento global, promoviendo acciones en los campos de la eficiencia energética en las empresas, la vivienda, el transporte, el consumo y el uso de los recursos.
® Conocer los actuales impactos generados, con la aspiración de llegar a la categoría ideal de ciudad sostenible desde una perspectiva más amplia que la meramente ambiental.
® Implicar a los ciudadanos en los procesos de elaboración y toma de decisiones, así como en la adquisición de hábitos y prácticas más adecuados a un comportamiento sostenible y eficiente. Entre otras, las buenas prácticas en el manejo de residuos y de aguas.
® Promover la producción orgánica en la región, la restauración de árboles nativos y la recuperación hídrica de la Región del Tunjuelo y del Gran Sumapaz.
® Preservar el patrimonio verde de la Ciudad y la Región, jerarquizando su rol en la ciudad como parte de su patrimonio natural; en especial potenciar la Reserva de Flora y Fauna y el cuidado de nuestros Páramos.
® Apoyar y Fomentar la responsabilidad y participación de los gobiernos, empresas, ciudadanos e instituciones en actividades de educación y capacitación para todas las áreas que lo requieran para efectivizar el desarrollo del proyecto.
® Generar vínculos de cooperación con experiencias similares a nivel nacional e internacional.
® Desarrollar la actividad científica, de estudio y de investigación en la Ecópolis Soñada.
® Crear las condiciones más propicias para la implantación y desarrollo de las innovaciones tecnológicas en materia de medio ambiente y tecnologías de la información.
¿Quién realizará Ecópolis?
Para asumir el reto de estas transformaciones la participación campesina, es la única garantía para cumplir con los fines perseguidos. Es así que los protagonistas serán los que viven y trabajan en la región ecopolitana y rural del Tunjuelo: apoyados por el sector urbano, representado en el gobierno local y Distrital, los vecinos de la Operación expansionista, los demás urbanos; las entidades públicas, privadas y sociales, trabajadores y empresarios, ONGs, profesionales, científicos, centros de enseñanza, etc.
Esta participación multisectorial y multidisciplinaria necesita la construcción de la articulación correspondiente entre organismos públicos y privados, agenciada con respeto hacia la simbología cultural campesina y su comportamiento social, para viabilizar las iniciativas y proyectos, que de esta nueva condición de vida se genere. Se hace necesario entonces, crear desde nuestro campesinado de Usme, de Ciudad Bolívar y Sumapaz, una manera estructural coordinada para desarrollar la Ecópolis del Tunjuelo y del Gran Sumapaz, con el fin de adelantar acciones y gestiones, tendientes a organizar a los actores implicados y generar actividades e instrumentos necesarios para canalizar propuestas e interactuar con los agentes identificados por la toma de decisiones y su interlocución válida y pertinente.
Somos privilegiados al vivir en un país con gran biodiversidad, con enormes posibilidades de abastecimiento en una zona de hermosa diversidad paisajística, donde convergen las sierras, los páramos y el mar, donde el turismo natural, se convierte en la actividad más productiva en relevancia y siendo la sostenibilidad una facultad inherente para el desarrollo exitoso y la permanencia en el tiempo. Son estas algunas de las razones que nos motiva a creer y trabajar en red con el sector campesino del Tunjuelo, para proyectarnos a vivir, de manera armónica en una Ciudad Ecológica, Biológica y Humanamente posible.
Tejamos redes para propiciar esta forma de vida colectiva, convirtámonos entonces, en tejedores de la Ecópolis Bogotana, al servicio nuestro y de los pobladores del mundo que gozan de buena voluntad.
Poblador del Planeta, arquitecto de seres, asesor ambiental y consultor para la organización territorial, humanizador de la vida y facilitador del desarrollo de su dignidad.